Sorprender, Fascinar, Convencer.
Trazos sobre el artista
Dibujar, ilustrar, sorprender, transgredir, emocionar.
Diseñador valenciano, barcelonés de adopción. “En el 2050 cumpliré 100 años”. La vida de Mariscal es una historia de amor con el dibujo. Javier Mariscal nace en el seno de una familia numerosa en los días grises de la postguerra española. El Mediterráneo, la albufera, la luz, los amigos, los bares, las calles, la alegría de vivir, marcan de manera indeleble su trayectoria vital y profesional. Desde su infancia mira el mundo imaginando nuevas formas, personajes e historias, huyendo de estereotipos, marcas y de cualquier tipo de catalogación.
A finales de los 60, su Valencia fallera se le queda pequeña, burguesa y a lomos de El Señor Caballito se traslada a Barcelona donde su olfato se tiñe de tintas gráficas y su vista exaltada sucumbe a carteles, vallas publicitarias, bolsas de colores y neones gigantes que visten una ciudad abierta, creativa, con “extravagancias humanas de un cromatismo cautivante”. Es un Mariscal que despierta a la contracultura y da rienda suelta a su etapa de dibujante de comics underground de la mano de sus garriris, unos hippies buscavidas que recorren en Vespa la costa jugando a atrapar la luna; con ellos, ansía construir otro mundo y otra manera de gozar la vida y sitúa a sus protagonistas en un territorio de frontera “donde masas inmensas, tierra y agua, se respetan”.